El origen de la danza está unido al origen del Homo Sapiens o puede que incluso a especies anteriores. Se cree que es una de las formas más primitivas de comunicación, siendo posiblemente anterior  a los primeros lenguajes orales. 

Danza Esencial, es un método de movimiento natural.

A través de la escucha interna y la conexión con nuestro cuerpo, buscamos recuperar ese lenguaje ancestral. Al hacerlo, conectamos con nuestro inconsciente, activamos nuestros instintos y llegamos a conocernos más profundamente.

Danza Esencial surge desde la necesidad de conectar con la esencia maestra que hay dentro de cada una de nosotras. Después de mis años de formación en distintas disciplinas de danza, encontré que la danza africana, era la que más conseguía llevarme a un estado de conexión con mi esencia y de meditación en movimiento.  Me llevaba más allá de los simples movimientos acompasados del sonido de los tambores.

Me conectaba con algo más grande que yo misma. Danza Esencial es una manera de viajar al otro mundo, es nuestro mundo interno y a la vez una especie de universo donde se consigue la conexión con el ser esencial, con nuestra información ancestral. Liberándonos de tapujos, de máscaras, de ataduras, de miedos, de juicios y conectándonos así con la humanidad y con el milagro mismo de la vida.

Sin embargo, durante este camino, he sentido como no es solo en el ámbito de la danza africana en concreto, si no la expresión del ser a través del cuerpo, de la voz, de la música en general; lo que consigue hacernos llevar a esa necesidad de conectar con el hogar que hay dentro de nosotras.

Esta es mi manera de conectar con mi universo y ponerlo al servicio de los demás, también a través de la voz, cantando siento que voy sanando, que una vez más vuelvo al hogar, a mi templo.

Y tú, ¿cuál es tu manera de volver a él? ¿ Cuál es tu vehículo para navegar por tu universo interior?

Si te interesa puedes pedir información sobre los seminarios de Danza Esencial.